Un chapuzón en la piscina es una excelente manera de liberar el estrés y hacer algo de ejercicio. Si estás buscando una piscina para tu hogar, o para dar un salto cualitativo en tu negocio, hay varios factores a tener en cuenta.
Una de las decisiones más importantes será la elección del material o liner de la piscina.

Actualmente se fabrican muchos tipos de acabados para las paredes de las piscinas. Tenemos que considerar variables como la resistencia, la durabilidad, la estanqueidad o la corrosión. Recuerda que solo las piscinas de obra necesitan revestimiento.

Pintura Sintética
La pintura sintética es una de las opciones menos costosas. Apto para piscinas de hormigón, resistente al cloro y antibacteriano. Normalmente se recomienda aplicar pintura de poro abierto por primera vez para permitir que el hormigón respire. Es necesario un mantenimiento anual.

Debemos recordar que la pintura de celda abierta no es impermeable. Además, hay que aplicar una mano de pintura regular cada dos años para no perder impermeabilidad.

Revestimiento de Fibra de Vidrio
La mayor ventaja que ofrece esta opción es su durabilidad, ya que tiene una vida útil de 20 años. Además, es un material que aporta resistencia y estanqueidad general. El único inconveniente de la fibra de vidrio es su precio, que es más alto que el de la pintura. Aunque si tenemos en cuenta su duración, es una elección muy interesante.

Porcelána, el material de piscina más elegante
El porcelánico es una opción muy elegante y moderna para el suelo de la piscina. Es un material muy resistente, duradero e higiénico. Resiste los cambios de clima y temperatura.

Este material contiene propiedades antideslizantes para evitar resbalones. Además, no pierde sus propiedades con el tiempo.

Podemos encontrar una enorme gama de colores y texturas. A la hora de limpiar requiere poco mantenimiento ya que es un liner muy limpio e higiénico que evita la aparición de hongos y moho.

La porcelana tiene un precio más alto en comparación con otras opciones de pintura para piscinas.

Acero Inoxidable
El acero inoxidable es muy resistente y flexible como revestimiento de piscina. Al no ser un material poroso, se reduce el riesgo de grietas o grietas.

Tiene un aspecto muy moderno e industrial. No tiene juntas porque son soldadas, por lo que se convierte en un liner de piscina muy higiénico y fácil de limpiar. Sus propiedades antiadherentes evitan que los organismos y microorganismos se adhieran. Además, es muy resistente a la corrosión ya los productos químicos habituales en las piscinas.

Exige poco mantenimiento y aunque el precio es alto, tiene una larga vida útil.

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